La imagen de un sublime cuerpo,
ante la inerte mirada de mi propia muerte…
ante la solemnidad de la nada
y el principio de la eternidad…
El recuerdo de años
y desde ahora ya ni uno,
más de mil amaneceres
pero… ¿cuál fue el primero?
más de todo y ni uno…
Pero… ¿desde cuándo no están?
¿Por qué no los siento?
¡Por qué!
Sabes escribo sin escribir
y es que lo hago en el viento…
y es que aunque quisiera
ya nada recuerdo…
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